Diario of Juan Bautista de Anza

Exploratory Expedition, 1774


Sunday, May 1, 1774 EN -- Dia 1 Domingo. De Monte Rey a la Mision de San Gabriel 120 leguas. De Mayo, me restitui a la Mision de San Gabriel. Sin embargo de lo que aqui mismo me restitui, o remiti al informe, que pueden haber dado de las circunstancias del terreno de Aqui a Monte Rey los Capitanes Don Gaspar de Portolá, y Don Miguel Constanzó me ha parecido bien añadir la actual cituacion de estos nuevos establecimientos posteriores al paso de dichos oficiales, segun lo que he visto, y me han informado. En las Naciones Gentiles no hai novedad que altere el concepto, que se tiene hecho de su mansedumbre y docilidad de la que cada dia dan maiores pruebas, ofreciendo a sus hijos para el báptismo, y algunos de ellos mismos, cuia oferta no se les ha admitido enteramente, por que como los viberes han andado tan faltos, no han tenido los Misioneros, conque mantenerlos, sin separarse de ellas, lo que se hace preciso una vez que reciben el caracter de christianos mas de quinientos, que ya lo son, y hai de aqui al Carmelo, me constan los mantienen sus Misioneros con solo quartillo [Footnote 63], y medio de atole aguado con lo que pasan el dia natural.

Los mismos padres me han dicho, que si aun este abundase habria sido duplicado, y triplicado, el fructo; pero que por la falta mencionada lo han echado, como dicen fuera de casa. Tienen esperanza de que en lo sucesivo se logre mejorar su trabajo, respecto á que en el presente año hai probabilidad de que alzen razonables cosechas de trigo, frustado hasta ahora mas por falta de semillas, que por esterilidad de la tierra.

Las labores, que yo he reconocido de este fruto mui proximamente en lo que es su propia fertilidad, grandeza de espiga, y gruesos de caña, no he visto ninguno tan bueno en las Provincias de Sonora, y lo mismo es la cevada, Alberjon, Aba, y otras verduras, pero el primero dicen desmerece mucho al tiempo de granar a causa de las continuas Nieblas, especialmente en el Carmelo, y Monte Rey, de cuio daño se escluie este San Gabriel, donde todas las frutas, que se han sembrado, con particularidad han sido su produccion, las Misiones subsiguientes á el como quiera que sea, tienen competentes labores del referido fructo.

Monday, May 2, 1774 EN -- Dia 2 Lunes. Mediante el Astrolabio, que se pudo adquirir en la Mision de San Diego, á donde se tomo el travajo de pasar a instruirse para su inteligencia el Reverendo Padre Fray Juan Diaz despues que el dia trece proximo pasado, despachó a su compañero el Padre Garces, y nuestra tropa al Rio Colorado y determinó el esperarme; en esta hizo la observacion de su altura, y la notó en treinta, y tres grados cinquenta y dos minutos.

Tuesday, May 3, 1774 EN -- Dia 3 Martes. De Monte Rey al arroyo de los Alisos 129 leguas. A las dos de la tarde sal? de la Mision de San Gabriel con rumbo al leste, y lest sureste enderezando, lo posible el camino, que traje á mi venida, cuia diligencia se practicarla para el maior ahorro de leguas, y andadas esta tarde cinco, paramos para hacer noche, en un Arroyo, que se le nombro de los Alisos, y es el primero, que sale a las inmediaciones de San Gabriel de la sierra Nevada, que referimos a nuestro primer arribo á la mencionada Mision.

Wednesday, May 4, 1774 EN -- Dia 4 Miercoles. De Monte Rey a la Laguna de San Antonio Bucareli 139 leguas. Con rumbo lest, camin? cinco leguas hasta pasar el Rio de Santa Ana, sobre las cuales se hicieron otras cinco mas hasta las inmediaciones de la Laguna de San Antonio de Bucareli.

Al norte de ella en la cordillera Nevada se v? una buena Abra, que juzgo la mas á proposito para salir en derechura á la Mision de San Luis, ó Presidio de Monte Rey, viniendo de la sonora, respecto, á que de la primera dicha antecedente descubr? con bastante distincion la referencia Cordillera Nevada, la que no tiene ninguna otra, con que equivocarse.

Thursday, May 5, 1774 EN -- Dia 5 Jueves. De Monte Rey al Valle de Sn. Patricio 144 leguas. Con rumbo por lo mas comun al Lest, lestsueste se caminaron quatro leguas hasta el valle ameno de San Jose quia altura se observó en treinta, y tres grados, quarenta, y seis, y medio minutos.

Despues de esta observacion continuamos nuestra marcha á los expresados rumbos por cinco leguas hasta llegar al citio de San Patricio.

Friday, May 6, 1774 EN -- Dia 6 Viernes. De Monte Rey a Santa Catharina 152 leguas. Salimos de San Patricio, y caminadas al Lest. sueste como ocho leguas, hicimos alto en el paraje de Santa Catharina para pasar la noche.

Habiendose observado la altura del Puerto Real de San Carlos, se anotó en treinta y tres grados, y quarenta, y dos minutos.

Al paso que hoi hicimos por las inmediaciones de unos cerros, ocultamente salieron unas flechas dirigidas a las caballerias, que se arreaban, de las que levemente hirieron a tres. Se diligencio á ver quien las disparaba, y se halló eran quatro Gentiles, y al mas culpado se le dieron unos azotes haciendole conocer, que por su hecho merecia la muerte, la que no se le daba por nuestra natural compasion. Llegado á este citio de Santa Catharina sup? por un escrito, que me dejó el Padre Garces, que marcha adelante le sucedia lo mismo.

Lo referido parece dimanó de haber entre estos Gentiles otros de las inmediaciones de San Diego, conocidos por la partida, que viene de Monte Rey, quien me informa han tenido siempre tal costumbre, e infiero, que por esta circunstancia ha acaecido lo dicho, pues cuando pasamos la primera vez, encontramos mas de doscientos, y no ocurrio mas novedad, que la inclinacion, que manifestaron al hurto de otras cosas de nuestro uso.

Saturday, May 7, 1774 EN -- Dia 7 Sabado. De Monte Rey a la Cienega de San Sebastian 163 leguas. Sin mas novedad que la expresada salimos de este sitio con rumbo por lo general al sueste, hasta llegar al paraje de San Gregorio, del que tomamos al Lest sueste, con el que verificamos, despues de andadas de diez a once leguas nuestro arribo a la Cienaga de San Sebastian.

Sunday, May 8, 1774 EN -- Dia 8 Domingo. Poco antes de salir el sol nos pusimos sobre la huella de la tropa, que va delante con esperanza de algun aguaje en la mediania de esta Cienaga. A la Laguna de Santa Olaya se caminó lo mas posible al Lest sueste, y tambi?n al sur, por desechar los medaños, que se atraviesan, cuio rumbo solo segu?, como la mencionada huella por siete leguas, a cuia conclusion tom? maior altura, que la que lleva la repetida tropa, de la que camin? otras diez hasta el Pozo de las Angustias, donde llegue ya entrada la Noche, y habiendose refrescado la Gente, por no haber pasto en aquellas inmediaciones, continuamos nuestra ruta para otras cinco leguas al Lest sueste.

Monday, May 9, 1774 EN -- Dia 9 Lunes. De Monte Rey á la Laguna de Santa Olaya en el Rio Colorado 185 leguas. Al concluir la mencionada anterior distancia, llegamos bien de mañana a esta Laguna de Santa Olaya. La jornada referida antecedentemente es la mas larga en el nuevo camino, que se ha descubierto; pero tomando la de los pozos del Carizal á los de Santa Rosa de Las Lajas se hará con toda comodidad pasando de los ultimos por otra marcha a la Cienaga de San Sebastian, de cuio modo las venceran sin el maior travajo cualquiera Requas.

Se observo en esta Laguna su altura, y se halló estar en treita y dos grados, y treinta, y quatro minutos. La tarde de este dia continuamos la Vega arriba del Rio Colorado, siguiendo por lo mas regular al lest. Caminadas como quatro leguas hicimos alto en el territorio de los Yumas en quienes era de admirar el regocijo, con que nos recibieron; pues todos incesantemente iban gritando, Capitán, Señor, Soldados, Compañeros, de cuio modo permanecieron toda la noche los muchos que se juntaron.

En ella me manifestaron con extraordinario sentimiento suio, que los soldados, que deje al cuidado del Capitán Palma se habian ydo contra el dictamen del mismo Capitán, y de mucho de ellos por solo la vaga noticia, que habla venido de la sierra, de que me habian muerto con la tropa los Gentiles de ellos, que dichos soldados hablan dejado en poder del mismo Palma algunos Viveres, en cuia casa los mantuvo hasta el arribo del Padre Garces quien se hallaba en ella, esperandome sin otra novedad.

Tuesday, May 10, 1774 EN -- Dia 10 Martes. De Monte Rey a la Junta de los rios Colorados y Gila 197. Caminando al Lest Norueste, y Leste ocho leguas llegu? al mediodia a la Junta de los rios, y citio de San Dionisio, á donde á poco concurrio el Capitán Palma con el mismo regocijo, que toda su Nacion de la que ya tenia á mi lado muchos centenares de ella. Tratandome con tanta satisfaccion, como si fuera de su propia naturaleza: me manifestó su contento por mi regreso, lo inconsolable que estuvo por la ida de los soldados que deje a su cuidado hasta la vuelta del Padre Garces, á quien me dijo tenia entregado unas cargas de Viveres, y Reses, que le dejaron los idos sin su dictamen: por todo lo dicho, y fidelidad que ha demostrado en este lance di á este Capitán Gentil las gracias, y alabanzas de las que es merecedor.

A las tres de la tarde de este mismo dia me tuvo prevenido el mencionado Capitán una fuerte Balisa para que pasara ambos Rios con los centenares de Gentes referidos para que la governaran, de quienes tuve tanta satisfaccion como si fuesen de mi propia Gente: el mismo Capitán me cargó para meterme en la Balsa con el Padre Fray Juan Diaz, y un criado mio; en ella pas? los rios, que tendrian de anchos y agua seiscientas varas; pero tan sin cuidado en el, que en mi vida he pasado otro con maior seguridad; atento á que, aunque se hubiera deshecho la Embarcacion lleva mui inmediatos mas de quinientas personas, que me liberasen, cuia satisfaccion lograron los demas, que me acompañaban, á quienes pasaron con todos nuestros trastes esta misma tarde.

Al las cinco de ella arrib? al campamento donde me esperaba el Padre Garces, y tropa, que venia por delante, quienes me confirmaron las noticias ya expresadas, y no haber ocurrido otras en su transito dignas de notarse.

Wednesday, May 11, 1774 EN -- Miercoles 11. Se observo la altura de este citio, muy inmediatamente a la de San Dionisio, en treinta, y dos grados, y quarenta y quatro minutos, la que no conviene con la que hizo el primer descubridor el Padre Francisco Eusebio Quino, como se refiere en el Libro de Afanes Apostolicos [Footnote 64] a folio 288 que anota haberlo observado en treinta y cinco y medio grados.

Este mismo dia se dedicó al descanso de todos.

Supuesto que hemos vuelto al Rio Colorado de muchos mas largo que lo que imaginaron pasar nuestros Predecesores, que Viajaron ? el, no será ageno decir, que aunque hemos procurado informarnos de estos Gentiles y otros; por donde hemos transitado acia que parte citua la famosa Sierra Azul, y Laguna de Azogue, que noticia el teniente Don Matheo Mange compañero del mencionado Padre Quino en una obra [Footnote 65] que dedico al Exmo. Señor Virrey Duque de Alburquer que como tambien el Rio Amarillo del otro lado del Colorado, no hemos hallado (aun dando por supuesto su existencia) fundamento para persuadirnos, a que se verifiquen tales especies.

Thursday, May 12, 1774 EN -- Dia 12 Juebes. Continuamos en estar aqui, y atento a que el Reverendo Padre Garces me ha participado, que con el correo, que va dirigido a su Exia., pidio al Governador de las Provincias la remesa de algunos viveres á esta parte, persuadiendose no tendriamos los sufcientes con los que existen para salir a mi Presidio; reconociendo yo lo contrario determine enviar hoy mismo dos soldados, a que vuelban qualesquiera que se conduzcan, por no poder hacer yo el Camino por donde deben venir.

La tarde de este dia hice que repasase el Rio colorado la partida que vino de Monterey, para que se regrese á el, impuesto de los rumbos y dereceras, por donde ban los caminos de aqui a la Sonora, y de los parajes en que pueden sacar Guias, si se les ofrece salir á ella.

Friday, May 13, 1774 EN -- Dia 13 Viernes. A poco que salio el sol levantamos nuestro tren para tomar la marcha, Rio Gila arriva, como se practico en las mas.

Yo me qued? en este citio hasta tanto, que el Capitán de los Yumas Palma concluia el paso á la otra parte del Colorado de quatro reses, que les di a la partida, que se regresa á Monte Rey quien habiendolo executado, se vino a despedir de mi, a cuio tiempo llegó un viejo Yuma con la noticia de que algunos individuos de la Nacion Cojat esperaban, á que yo me retirase para robarles á la mencionada partida algunos caballos, por que eran de las partes de donde vivian los Jaguenches sus Enemigos, á quienes por tanto no reconocian por sus Parientes, como ami, y á mi tropa, en lo que añadia el Author estaba opuesto lo mas de la misma Nacion.

Como en tales asuntos nada debe despreciarse, sin embargo de la simplicidad, y sencillez, que muestra el hecho, determine de luego á luego para obviar todo infortuno lance embiar al Capitán Palma con el Natural de California, á fin de que sacase á la mencionada Partida de aquel terreno dandole aviso de lo referido con otras prevenciones que le envie por escrito al cabo correspondientes a el asunto en todo su transito; y asi mismo noticia a los authores de la novedad de que me quedaba a observar si ponian en practica su mal obra para castigarlo, y para maior apariencia de ello envie a volber nuestro tren, lo que se verificó la tarde de este d?a á tiempo, que un Pariente del Capitán Palma me noticio, que llevaba en su compañia mas de doscientos Yumas escogidos para ir a sacar libre a nuestra referida Partida.

Saturday, May 14, 1774 EN -- Dia 14 Sabado. No ocurrio novedad particular.

Sunday, May 15, 1774 EN -- Dia 15 Domingo. De Monte Rey al Rio Gila 197 leguas [Footnote 66]. A las doce de el se regresó el Capitán Palma con el Natural de California con quien recibi noticia del cabo de la Partida, que vuelbe a Monterey, á que estaba proximo a continuar su marcha del citio, á donde le dejaban hasta el qual no habia tenido novedad, que lo metiese en cuidado, ni ya de aquel citio esperaba tenerlo.

Que el referido Capitán Palma le habia entregado dos caballerias, que el dia anterior se le habian perdido, y tomandolos dos Mozos Gentiles, de cuio poder las saco con castigo el mismo Palma quien al propio tiempo lo hizo de una acha, que condujo, que nos habian hurtado, la que le cedi, contextos ambos me informaron, que la ocurrencia anotada fue solo conversacion de algunos Mosos, la cual el hubiera reparado, aun sin mi presencia, como lo haria mientras viva, en quio tiempo no se separaria con toda su Nacion de nuestro afecto, y fidelidad al Rey.

Reiter? a este Capitán Gentil se conservase en Paz con las Naciones inmediatas, por ser su voluntad de ambas Magestades, que atendiese, y sacase a nuestras poblaciones qualquier Español, que arribase a su territorio, lo que con otras prevenciones quedó de executar. Le di en recompensa de los servicios, que ha hecho al Rey, mi Baston, quatro reses y otras prendas de vestir, y me hubiera alegrado tener maiores proporciones para mas gratificar a un Barbaro Gentil, que puede no se le enquentre en su especie igual.

A las tres de la tarde me despedi del mencionado Capitán, y me pas? en marcha Rio Gila arriva, el que desde que nace hasta que se junta con el Colorado corre por lo comun de Noreste, y oriente á sur, y oest, por el que determin? subir á fin de hacer mi regreso mas derecho, y comodo a mi Presidio, como por poner en Paz á las Naciones, que lo abitan.

Andadas tres leguas hice alto para pasar la noche á orillas del mencionado Rio, en sitio donde se halla pasto.

Monday, May 16, 1774 EN -- Dia 16 Lunes. Al aclararse me puse en camino a continuacion de este Rio, de su abundancia de agua, y buenas tierras para sembrar, aunque con mui poco, o ningun pasto pues en la distancia de ocho á nuebe leguas no se halló sinó un corto pedazo.

Tuesday, May 17, 1774 EN -- Dia 17 Martes. Al aclararse subi por el mismo rio seis leguas, al fin de las cuales pasamos por la punta de la sierra de donde remata la del aguaje empinado citado á nuestra ida, á la que le nombr? san pasqual, y á la mencionada distancia agregamos otras dos leguas, en don

Wednesday, May 18, 1774 EN -- Dia 18 Miercoles. De Monterey a la primera Rancheria de los cocomaricopas y citio de San Bernardino en el Rio Gila 221, leguas. A las horas del dia anterior continuamos por el mismo rio, en el que se cortó huellas de Gentiles, las que, seguidas por quatro leguas nos condujo a una Rancheria de como cien Personas de la Nacion Cocomaricopa, quien no se amedentro lo maior respecto á hallarse entre ellas un Papago, ó Pima, por cuio medio, y el de mi interprete de este Idioma nos entendimos todos, y por los mismos los exhorte en el modo ya referido a los yumas á la paz con estas y otras Naciones con advertencia de qualquiera que fuese insultado por otra pasase el aviso á los Presidios.

El resto de este dia determin? quedarme entre estos Gentiles quienes me regalaron las pocas cosas de sustento que tenian.

Esta Nacion es conocida tanto por nosotros; como por los Pimas, y Yumas por el nombre que les damos. Su idioma es el mismo, que el de los ultimos, y lo mismo sus costumbres, talle y robustez: se diferencian de los dichos en ir todos estos cubiertos al menos lo indecente, y mejor armados: costumbres, que han recibido de los Pimas, ó Papagos, con quien están emparentados: viven algunos en este rio, y los mas entre las Sierras, que median en el Colorado, y Gila, su numero, segun me informaron ellos, y los Papagos, ó Pimas es poco menos, que los Yumas: estos tales Cocomaricopas en todos tiempos, que ha pasado nuestra tropa por su Paiz les ha sido favorable al citio donde hoi estamos le nombre San Bernardino. Sc observo su altura de Norte, y se anot? en 33 grados, 2 minutos.

Thursday, May 19, 1774 EN -- Dia 19 Jueves. Al aclararse subi el mismo Rio por la vanda o punta que ayer traje, y á la distancia de cinco leguas de San Bernardino pasamos por un buen ojo de agua caliente, por cuio nombre es conocido, la que es suficiente para regar un gran pedazo de tierra, que en otro tiempo se conoce lo hacian los Cocomaricopas, quienes lo han abandonado por las Guerras con los Yumas, segun me informa un Pima, que me acompaña, sobre las cinco dichas se anduvieron otras tres leguas hasta parar donde se halló pasto, y se hizo la noche.

Friday, May 20, 1774 EN -- Dia 20 Viernes. Al salir el sol repasamos el gila, que tanto aqui, como lo ya andado no vaja su fondo en los mas comun de quatro palmos, con todo, que ahora es el tiempo de su maior seca; en el de sus avenidas, me dicen sus Naturales, es en el de las aguas de verano, y que en esta ocasion no vajará de quinientas varas [Footnote 67] lo que se ancha, y asi se manifiesta en las señales, que deja.

Inmediatamente que lo repasamos, se montaron Unas buenas Lomas que ocuparon tres leguas, al fin de las quales vajamos á su Vega, por las que se continuaron otras dos hasta las inmediaciones de San Simón, y Judas de Upasoitac, donde hice noche, sitio bien poblado de los expresados Cocomaricopas, y otros que vienen á ser lo mismo, aunque los llamen Opas, á los que se agregan en el dia algunos Papagos, ó Pimas, que han desamparado su Paiz por la gran seca, que se experimenta en el, y maior hambre.

Por la primera antecedente causa no puedo hacer el transito de aqui á mi Presidio, como debia ser, el que solo distará quarenta leguas de buenos terrenos, y Pastos, en cuia falta determino hacerlo de las agitaciones de los Pimas, para lo que es necesario subir mas este Rio.

Saturday, May 21, 1774 EN -- Dia 21 Sabado. á Oposoitac ultima Rancheria de los Cocomaricopas en el mismo Rio Gila 233 leguas, Andada una legua hice alto en el mismo citio, de San Simón, y Judas de Upasoitac: se observó la altura de este citio, y se halló estar en treinta y tres grados, y quince minutos.

Habiendo estado en el otras ocasiones el Reverendo Padre Garces, determino quedarse aqui, con el fin de experimentar, si por medio de las Naciones que pueblan de el á la Provincia de Moqui, de queda noticias, es posible introducir á la del Nuevo Mexico una carta. Se quedo con el mencionado Padre un Sirviente mio.

A las dos y media de la tarde sali de este citio para la de las agitaciones de los Pimas por atravesia de buen terreno para ahorrar la vuelta, que da el Rio al Norte, despobladas de Gentes, andadas siete leguas con parte de la noche, se hizo alto para descansar en paraje donde se halló pasto.

Sunday, May 22, 1774 EN -- Dia 22 Domingo. De Monte Rey al Sutaquison, y primeros Pimas en el Rio Gila 246 leguas. Al aclararse continuamos la marcha y al finalizar seis leguas hice alto en la Rancheria de Pimas del Sutaquison, que se mantiene en el fixa, y tiene mas de dos mil almas, cuios Naturales, como antes se ha dicho, son afectos a las siembras: una de las labores que vi, y me dicen, que es la menor que tienen se regulo lo sembrado en ella de sesenta á ochenta fanegas de trigo dado á las mil maravillas, y proximo á cosechar. Esta Rancheria reconoce por su Juez, ó Capitan al que lo es de mi Presidio en cuia virtud nombre aqui Governador, como siempre lo ha acostumbrado tener, cuio empleo con el de la Rancheria que sigue estaban vacantes por muerte de los que las ocupaban. Aqui se manifiesta mui visiblemente por los cimientos, y aun parte de Paredes un Palacio, de los que formaba la Nacion, que se cre? fue á establecer su imperio á la Ciudad de Mexico.

Al anterior citio de Opasoitac, y al presente de que hablamos llega ya la infernal peste de los Apaches, quienes no ha mucho dieron muerte á doce Naturales de el primero, y menos hace á otras sesenta del segundo.

Monday, May 23, 1774 EN -- Dia 23 Lunes. De Monterrey á el Juturitucan ultimos Pimas en el Rio Gila 248 leguas. Continuando dos leguas por esta Vega, al finalizar hice alto para quedarme esta noche en la Rancheria de Jutunitucan, o las San Juan Capistrano maior en todo que la anterior, donde hice Governador, y Alcalde a dos hermanos, Hijos del que lo fue, quienes tienen a su mando como tres mil personas, que todas viven con bastante union escarmentados de los ultimos golpes que les han dado los Apaches.

Las labores que poseen actualmente de trigo son tan grandes, que puesto en medio de ellas, no se alcanzan á ver su remate por lo que hace á lo largo; su ancho es bastante, y quanto ocupa el del Valle por una, y otra parte, y á esta correspondencia son las siembras de Maiz.

Habiendose observado el dia antecedente la altura del Sutaquison se anotó en treinta y tres grados veinte y cuatro minutos.

Tuesday, May 24, 1774 EN -- Dia 24 Martes. Al salir el sol, levantado nuestro tren y caminadas dos leguas por el mismo Rio, hicimos alto á su orilla donde se halló pasto.

Al igual distancia, y mas arriva de donde estamos hai otro Palacio (que es conocido por de Moctezuma) y poblacion maior, que el referido de atras: la Fabrica de este es un Laberito de que han sacado las inteligentes curiosas copias; se conoce tenia altos. Hoi existen las paredes tan altas que se ven de mas de una legua, esto dista lo menos del rio, el qual introducian por debajo del mismo Palacio, y resto de la poblacion para tener la aqua á mano: la materia de estas obras es de tierra puramente, pero tambi?n es mixturado con piedra menuda, ó Arenas gruesas, que parecen por su consistencia de la mas fina mescla, o Argamasa, cuia maior prueba es su permanencia despu?s de tantos años, que se regulan tener.

A las dos de la tarde dejando a nuestras espaldas el Rio Gila volvimos a nuestra marcha con rumbo al sur, al que caminamos hasta la media noche, que se hizo alto para descansar un rato.

Wednesday, May 25, 1774 EN -- Dia 25 Miercoles. De Monterey al pueblo de Pimas del Tugson 274. Antes de aclarar volvimos a la marcha al propio rumbo citado, haciendola por terreno llano, como la tarde anterior, y a las once de el paramos en la punta del ojo de Agua del Tugson para repararnos de lo ardiente del sol; caminadas esta tarde como legua, y media al fin de ellas arribamos al mencionado Pueblo, perteneciente a la Jurisdiccion de mi Presidio, y á Pimas altos, de los que tienen ochenta familias.

Dista del Gila veinte y quatro leguas, y aunque yo las he andado sin agua, no es por que falte en su promedio pues la hai en el paraje de la Aquituni, donde reside una Rancheria de Papagos de sesenta familias, por lo que no hice transito, á causa de ser la tierra quebrada, y que si en ella lenta algun enquentro de Apaches ya mui frequentes, por aqui no me hallaba en proporcion de sacar bien a salvo nuestro tren, por venir todos los que me acompañan montados en Mulas mui estropeadas, las que, aun no estando, son inutiles para tales lances.

Thursday, May 26, 1774 EN -- Dia 26 Jueves. Antes de aclararse recibi por seis soldados de mi compañia orden del Ayudante inspector Don Antonio Bonillas, para que abreviase mi arribo á el, Noticioso de mi salida á esta parte por los dos soldados se refieren en el dia doce del presente.

En cumplimiento de la citada orden sali de este Pueblo á poco que amanecio, siguiendo el rumbo sur á que cae mi mencionado Presidio con animo de llegar hoi, sin embargo de distar veinte leguas: di las correspondientes providencias para que el todo de los soldados, que me han acompañado en la expedicion, y nuestro carruaje contin?en en venir poco a poco á llegar mañana.

En consorcio de los seis mencionados soldados; y del Reverendo Padre Frai Juan Diaz que quiso seguirme prosegui mi ruta, á cuio remate de las primeras cinco leguas pas? por el pueblo de San Xavier del Bac de la enunciada Nacion y quarenta familias cabezera de la anterior, y siguiendo por otras quince, al concluirlas, y ponerse el sol arrib? al Presidio de Tubac, que es el de mi cargo.

En el encargue al reverendo Padre Fray Juan Diaz, que ha sido quien ha hecho las observaciones de nuestro transito expresase en un Mapa el que hemos efectuado para darle una idea al Exmo. Sor. Virey de los rumbos, Rancherias, y demas particularidades que hamos notado.

Friday, May 27, 1774 EN -- Dia 27 Viernes. De Monte Rey al Presidio de Tubac 294 leguas. A las doce de el llegó a al mencionado Presidio el resto de la Expedicion, que deje atras, con lo que se ha verificado la total conclusion de ella, con las felicidades, y ventajas, que quedan expresadas en lo descripto anteior, por lo que sea el Señor de los Exercitos bendito y alabado.

Hoy trece de noviembre de mil setecientos setenta y quatro años saqu? esta copia para entregar en el mismo dia al Exmo. Señor Virey, Governador, y Capitan General en esta ciudad de Mexico, en cuias manos igualmente tengo entregado el Mapa, que antecedentemente se cita = Juan Bautista de Anza.

En 24 de Nbre de 74 se sacó testimonio por pral de este Diario para dar quenta a s ....